Escudos y colores de la Liga: Real Club Deportivo de La Coruña

Fundación: 1906
Número de socios: 30.000
Estadio: Municipal de Riazor
Terreno de Juego: 105 x 68 metros
Capacidad: 35.000 espectadores
Número de peñas: 287 (de las cuales 244 están en Galicia)
Marca: Lotto (a partir del 2009)

Palmarés:
Nacionales
Liga: 1 Campeonato: 1999-2000
Copa: 2 títulos: 1995 y 2002
Supercopa de España: 3: 1995, 2000 y 2002

Colores: Rayas verticales azules y blancas, pantalón azul.
Origen: En el año 1902, José María Abalo, coruñés que por aquel entonces estudiaba en Inglaterra, introdujo el fútbol en la ciudad. Un gimnasio de La Coruña -el Club Deportivo Sala Calvet- comenzó a practicar poco tiempo después esta nueva modalidad deportiva, actuando como precursor del equipo de fútbol y del cual tomaría sus colores: camiseta a rayas verticales azules y blancas con pantalón negro.

El conjunto herculino comenzó participando en sus primeras citas con una equipación blanca en la parte superior y negra en la inferior. En 1912 es cuando se adoptaron definitivamente los colores actuales a rayas azules y blancas.

Como homenaje al gimnasio, en el escudo del equipo aparece la insignia de Sala Calvet -una cruz morada- junto con la bandera de Galicia que se sitúa en la parte superior izquierda de la cruz. Todo ello rodeado por un cinturón de caballero abrochado.

El nombre del estadio lo toma de la playa más famosa de La Coruña, Riazor, situada dentro del marco urbano y con una característica forma de concha, la cual alcanza los 600 metros de longitud. La playa, junto al faro, son dos de las señas de identidad de la ciudad. 

El prestigioso torneo veraniego: el Teresa Herrera

Hasta la década de los 90, -época del mayor éxito deportivista y por el cual se le comenzó a denominar al equipo como Súper Depor- la entidad herculina era famosa casi exclusivamente por la celebración de su torneo veraniego, el decano de los celebrados en España, el Teresa Herrera, más que por sus logros deportivos. Los éxitos blanquiazules estaban reducidos a alcanzar la élite del fútbol nacional. Durante un extenso periodo de tiempo, el Deportivo se ganó el apodo de 'equipo ascensor' por su alternancia entre la Primera y la categoría de plata del balompié nacional.

Teresa Margarita Herrera nació en la Coruña en 1712. Viuda y con diez hijos, dedicó parte de su vida a luchar por los más desfavorecidos a través de donaciones para fundar hospitales. En 1946 nace el trofeo con carácter benéfico, al principio el reglamento no permitía la participación del equipo coruñés, pero poco después el Deportivo comenzó a disputarlo sirviendo de presentación de la temporada ante su público.

Siempre se ha caracterizado por tener un cartel de prestigio llegando a ser en algunas ediciones casi un mundial de clubes por el palmarés de sus participantes. Hasta 70 equipos diferentes han disputado el Teresa Herrera a lo largo de su historia.

En la actualidad, el trofeo muestra una reproducción a gran escala de la torre de Hércules, faro romano del siglo I que todavía está en funcionamiento y que es otra de las estampas características de La Coruña. Anteriormente, el galardón tuvo hasta seis tipos de diseños diferentes, siempre caracterizados por su gran volumen y su extraordinario trabajo de orfebrería.

Los éxitos deportivistas: la Liga y el 'centenariazo'
Una de sus mayores gestas, además de la primera Liga de la temporada 1999-00, fue la de alzarse con el triunfo en la final de Copa celebrada en el Bernabéu ante el Real Madrid, el mismo día en que el club blanco celebraba su centenario, 6 de marzo de 2002. A esta victoria se la conoce, por ese motivo, como el "centenariazo" por el paralelismo con la victoria de Uruguay frente a Brasil en Maracaná, durante el último partido del mundial de 1950, al que se denominó "maracanazo".

Motes deportivistas
A los hinchas blanquiazules se les conoce como turcos. Todo empezó como un intento de insulto por parte de la afición del Celta hacia los seguidores del Depor, que lo tomaron más como un halago que como una ofensa. De hecho, es bastante normal ver actualmente en Riazor banderas de Turquía.

La procedencia de este sobrenombre no tiene una explicación oficial y las distintas hipótesis van desde una canción del grupo Os Resentidos pasando por la campaña de turismo propuesta por el ayuntamiento de Coruña, y que tenía por nombre TURCORUÑA, hasta el hecho que desde Vigo se considerara a los coruñeses como poco gallegos, por no hablar el idioma tan a menudo.

Volviendo al mundo de la música, el grupo orensano de Los Suaves son confesos seguidores del equipo deportivista. De hecho una de las secciones dentro de la peña Riazor Blues toma ese nombre y el símbolo de la banda de rock que consiste en el rostro de un gato dentro de un círculo.

Los rivales del equipo 'herculino'

El Deportivo guarda una rivalidad fuerte con el Real Madrid, Valencia y con el Real Club Celta de Vigo. La enemistad deportivista con el conjunto blanco ha ido creciendo con el paso de los años, pasando de ser un equipo respetado en Riazor a un enemigo a la altura de los vecinos vigueses, con los cuales vive el caliente derbi gallego.

La historia con el Valencia tiene una fecha y hasta un motivo. La temporada 1993/94 era la confirmación del club. El Dépor había pasado de ser la revelación a candidato a los títulos en liza, tanto es así que un penalti separó a los blanquiazules de su primera Liga el 14 de mayo de 1994. La pena máxima fue ejecutada y errada por Djukic en el último minuto con una desproporcionada celebración del meta valencianista González. Las sospechas de la prima por parte del Barcelona, a la postre vencedor del torneo, avivaron la animadversión entre sendas entidades.

En aquellas décadas, el Dépor de ensueño encabezado por el coruñés Fran y el brasileño Mauro Silva, los dos grandes pilares, contaron con importantes figuras mundiales como Bebeto -el gran goleador del equipo, aunque desechara lanzar el fatídico penalti ante el Valencia-, Djukic, Naybet, Donato, Tristán, Makaay, Rivaldo, Valerón... completaban este legendario plantel.

El fútbol fue generoso con este proyecto con cinco títulos en el espacio de siete años. Un justo premio a un equipo que no sólo se codeó con los grandes de España sino que plantó cara a los colosos europeos con meritorios partidos ante el Bayern, PSG, Juventus o Manchester United, gestas continentales que han pasado a la memoria colectiva de los coruñeses.