La grandeza de este evento no sólo es por la cantidad de espectadores, o por el coste que pueda tener un anuncio durante el descanso o por el espectáculo en sí, también lo es porque es el único deporte profesional norteamericano cuyo campeón desde 1967 se decide a un único encuentro entre los vencedores de la conferencia americana y nacional.
El primero en inscribir su nombre de campeón de la Super Bowl, por dos veces, fue precisamente una de las franquicias más antiguas, Green Bay Packers, dirigidos por Vince Lombardi, quién falleció en 1970 a causa del cáncer y como homenaje a esta leyenda del fútbol americano el trofeo de vencedor de la Super Bowl desde 1996 (edición XXX) lleva el nombre del entrenador de origen italiano.
La final: Packers vs Steelers
El partido celebrado anoche en Dallas, enfrentaba a los Pittsburgh Steelers, con el récord de ser seis veces campeones, contra los Green Bay Packers. Posiblemente, dos de las aficiones más bulliciosas y animosas de toda la NFL que llenaban el estadio. Entre el público se encontraban celebridades como Michael Douglas, Catherine Zeta Jones o Cameron Diaz quien parecía seguir interpretando el papel de presidenta de un equipo de la liga profesional como en la excelente película de Oliver Stone, 'Un domingo cualquiera'.
El partido se puso de cara para el conjunto de la capital del queso con dos touchdowns en el primer cuarto, uno de ellos merced a una intercepción.
En el segundo cuarto los Steelers anotaban un field goal que fue respondido con otro touchdown de los Packers para dejar el marcador en un 3-21 que parecía inalcanzable para los hexacampeones. Sobre la bocina el equipo acerero consiguió acortar distancias con su primer touchdown dejando el electrónico del impresionante marcador de Dallas en 10-21.
En el segundo tiempo los Steelers salieron más enchufados anotando en menos de cinco minutos y reduciendo la ventaja a 17-21.
En el último cuarto, otra pérdida de balón nada más empezar, ésta vez un fumble de Pittsburgh en la yarda 35 del campo contrario dio alas a Green Bay que volvía a anotar, 17-28.
Las prisas de Ben Roethlisberger, junto con su acierto en los pases, hicieron que en el siguiente drive los Steelers sumaran ocho puntos seguidos, touchdown más la conversión de dos puntos en jugada en vez de optar por el extra point.
La emoción estaba servida para el final, quedaban siete minutos y el marcador era 25-28. Green Bay intentó alargar la agonía de Pittsburgh con una posesión larga de cinco minutos que terminó en un field goal de 23 yardas, 25-31.
Quedaban dos minutos y los Steelers tenían la oportunidad de vencer y agotaron hasta el cuarto down su ataque pero la defensa de los Packers evitaba la proeza de la remontada.
Green Bay, dirigidos brillantemente en el campo por Aaron Rodgers -concluyó el partido con 24 pases completados de 39 para 304 yardas, con tres envíos de anotación- , recogían el relevo del mítico Brett Favre que había llevado a los cabeza quesos a su anterior victoria en 1996.
- Steelers 0 10 7 8 25
- Packers 14 7 0 10 31
La verdad es que no vi el partido pero sí puedo decir que es una de las finales más clasicas de la historia, son sin duda dos equipos hitóricos. simplemente apuntar que los Packers, para el que no lo sepa, están radicados en Milwakee.
ResponderEliminarGonzalo Largacha Lamela
¡Hola Álvaro!
ResponderEliminarTan sólo enviarte un saludo y muchos recuerdos
Graff Werner von Schleidt
Herr Wermer, Wilkommen. ;-)
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