La prolífica carrera de los de Yorkshire siempre ha ido acompañada de una extraordinaria actitud camaleónica, reinventándose en cada nuevo trabajo, ofreciendo un nuevo punto de vista, como un dodecaedro formado por multitud de caras y una misma base.
Paradise Lost, el cual toma nombre del relato del siglo XVII escrito por John Milton, coincide con el poema en la temática religiosa y un tono épico que en manos del dúo compositor formado por Nick Holmes -cantante- y Greg Mackintosh -guitarra principal y teclados- se hace más tenebroso.
Esta formación de culto, que curiosamente nunca ha llegado a calar profundamente en Inglaterra, ha creado escuela y adeptos con cada paso, aunque no los suficientes para la gran repercusión que han tenido. Son pioneros en varios estilos musicales como el doom metal, un subgénero del heavy metal al que se le otorga una atmósfera más tranquila, y de esa fusión tan personal del gótico con el metal, donde los violines o los teclados pasan de ser un envoltorio a liderar algunas de las composiciones.
Paradise Lost, 6 de noviembre en la Sala Arena de Madrid
Con un leve retraso, respecto al horario previsto, salió el quinteto de las sombras de la Sala Arena para extender la oscuridad que alberga su último disco, cuyo protagonismo destacó sobre el resto de trabajos.
Era lógico. Los británicos presentaban 'The Plague Within' y sobre él construyeron un recorrido que a veces sufría salpicaduras de otros discos anteriores del combo. Arrancaron con No Hope in Sight, un tema con mucha pegada que exige varios cambios en la gargante de Holmes, pasando de insinuar a desgañitarse con voz gutural.
Inicio del concierto de Paradise Lost
Posted by Memorias de una cinta VHS on Viernes, 6 de noviembre de 2015
Widow fue el primer guiño al pasado, a ese momento en el que el grupo coqueteaba con el death metal antes de decantarse por la innovación. Un CD muy acorde al actual, donde se ha profundizado en los raíces para ofrecer una estructura muy densa y pesada, con una batería tremendamente atronadora y dominante, con alguna concesión a la melodía pero endureciendo en líneas generales la oferta musical.
Los teclados de Erased, Praise Lamented Shade y Enchantment significaron la primera tregua con esa ambientación más gótica, pausada pero a la vez potente, lo suficiente para seguir manteniendo la atención de un público participativo que parecía haber contagiado a un irreconocible Holmes, quien incluso bromeaba con las primeras filas del abarrotado recinto madrileño.
Antes de que llegara el necesario descanso, As I Die y Requiem hacían de perfecto puente entre los inicios de la formación, la confirmación y su madurez compositiva, una de las claves del éxito de PL.
El arranque épico de Return To The Sun fue el mejor pretexto para encarar la recta final con otro corte más de este último álbum, flanqueando a dos de los mejores himnos de Paradise Lost, dentro de la extensa colección que atesoran y que desgraciadamente muchos de ellos quedaron olvidados en sus maletas.
Faith Divides Us - Death Unites Us sonó deliciosa, creando ese sonido a la vez grandioso y sugerente que An Eternity Of Lies continuó para rescatar, por último, el clásico Say Just Words, el que demuestra la sobresaliente creatividad de un quinteto de lujo que ha instalado su paraíso en la tierra y al que la versatilidad no le pierde. Amén.
Buena entrada compañero.
ResponderEliminarMe voy con la música a otra parte.
¡Feliz fin de semana!
¡Venga! No te vayas muy lejos, que ya empieza a hacer frío y más en Alcalá. :-)
Eliminarhe disfrutado tu texto Tienes un blog diferente un abrazo
ResponderEliminarGracias por el halago. No sé cómo habrás llegado a parar aquí, pero lo celebro.
EliminarEscribes tan bien de los grupos que a uno le da gana ir al concierto, incluso aunque sea grupos como Hellowen que no son mi estilo ni mucho menos. Hay una película sobre el Punk de Whasinton que podría ser interesante de ver, se llama Salad day´s.
ResponderEliminarGonzalo Largacha
PD Luego cuando saquen un documental sobre los Hipster y los Feroches también vamos a verlo.
Muchísimas gracias. La verdad es que ni estos ni Helloween encajan mucho con lo que te gusta. Siempre nos quedará Bad Religion o Rise Against. Es una pena que trabajara esa noche, porque ese concierto, creo que fue en septiembre, sí que hubiéramos coincidido.
EliminarMuy bueno lo del documental del punk. Lo apunto.
Jajajajaja. Creo que no necesitamos ni documental, lo vivimos a diario.